viernes, 3 de diciembre de 2010

Entre física y metafísica...

...me cojo un descansillo.
Ese chiste (Es un chiste, sí; o eso dicen) lo hizo un compañero de clase hace unos días, cuándo todos nos enteramos de que mañana, hoy, es decir -ya son las 2 de la mañana, al fin y al cabo -, tendríamos los exámenes de filosofía y física.
Física y metafísica. Suena a programa televisivo sobre misterios tipo Cuarto Milenio, o algo así... Aunque a mí, personalmente, esto me da miedo de verdad.

Entre Aristóteles y los péndulos que oscilan un ángulo no mayor de 18º (no, no, no) o las ondas que se suman o se contrarrestan dependiendo de en qué momento se encuenten, hago una pausa para pararme a pensar en por qué dejo siempre las cosas para el final.

Asdf... No voy a ponerme a decir lo que me pesan los párpados en estos momentos porque no procede, pero juro que no cumplen la ley de la gravedad. ¡Ey, mira! Mientras escribo, repaso...


Aristóteles fue discípulo de Platón durante 20 años y lo único que sacó en claro de eso fue que no estaba de acuerdo con su maestro. Para que luego digan... Si es que nunca es tarde para corregir el camino que uno lleva. Aunque, no seamos malos, que en la filosofía de Aristóteles hay alguna que otra huella de Platón... Y es que dos décadas son dos décadas...

No sé si es la hora y mi cabeza no rige o si, simplemente, esto me supera, pero...
"[...] así también “algo que es” se dice en muchos sentidos, pero en todos los casos en relación con un único principio: de unas cosas [se dice que son] por ser entidades, de otras por ser afecciones de la entidad, de otras por ser un proceso hacia la entidad, o bien corrupciones o privaciones o cualidades o agentes productivos o agentes generadores ya de la entidad ya de aquellas cosas que se dicen en relación con la entidad, o bien por ser negaciones ya de alguna de estas cosas ya de la entidad.
[...]"
Creo que, en serio... No puedo con esto XD

Buenas noches...

2 comentarios:

  1. ¡¡¡Dios mío!!! Te compadezco. Y... sí, buenas noches.

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  2. Admito que ese texto a esas horas acabó conmigo y tuve que irme a dormir como única solución.

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